Las redes sociales aumentan las posibilidades de contacto con otras personas, recuperar antiguas parejas o antiguos compañeros de estudio y conocer a nuevos amigos. Y todo esto unido ha generado un aumento de infidelidades dentro de la pareja. Se ha revolucionado la forma de conocerse y de relacionarse. La comunicación es más rápida y directa, pero aún así, hay que tener cuidado porque, si se tiene pareja, puede dejarse rastro y la otra parte puede descubrir el engaño.