Con una simple ecografía, un científico ha querido demostrar que existe el esquivo punto, pero NO LO TIENEN TODAS LAS MUJERES. ¿Qué supondría esto para la sexualidad de las que sí, la de las que no y la de sus parejas? Mira que era fácil y no se nos había ocurrido. Llevamos años discutiendo su existencia, intentando averiguar su lugar exacto, su verdadera utilidad… pero nadie había pensado en hacerle una foto.