Si algo distingue a los humanos, es su capacidad para comunicarse a través de la mirada.Auguste von Bayern, zoólogo de la Universidad de Oxford, acaba de descubrir que las grajillas (Corvus monedula), un ave de la familia de los cuervos, no solo son capaces de comunicarse entre sí con los ojos, sino que pueden interpretar la mirada de los seres humanos y utilizar la información en su provecho.