La excusa tiene su gracia y probablemente se pueda extender a la acción política del PSOE al menos desde mayo de 2010 si no desde Suresnes. Dado que la autocrítica no existe (o se limita a decir que los salmantinos del PSOE no dicen lo mismo que los catalanes del PSOE, como si no fuera deseable incluso que un salmantino del PSOE no dijera lo mismo que otro salmantino del PSOE) bien se podría explicar todo como un hackeo: el PSOE no votó la reforma laboral, no aprobó la subida del IVA sin tocar los impuestos progresivos ni el fraude fiscal...