[c&p] Hace más de tres décadas, unos científicos trabajaron en lo que entonces se consideraba una idea radical, implantar minúsculos dispositivos electrónicos de audición en el oído interno para ayudar a las personas que sufrían de sordera profunda. Se desechó, no obstante, una alternativa aún más osada que prometía resultados superiores y que consistía en implantar un dispositivo directamente en el nervio auditivo, pues se consideró que era demasiado pedir para la tecnología del momento. Sin embargo, en la actualidad ...