Zona de pruebas de la bomba de hidrógeno. Desierto de Nevada, 1955. Brian Bell y su preciosa esposa Peggy se han prestado voluntarios para probar la seguridad de un refugio antinuclear. El premio consiste en una hermosa casita en Phoenix, Arizona. Situado a 7 metros de profundidad y cubierto por paredes reforzadas con plomo de 15 centímetros de espesor, el refugio se encuentra situado a tan sólo 200 metros de la explosión. Durante meses, el matrimonio Bell ha sido inoculado con dosis de una vacuna experimental que, al parecer, posee...