Imaginemos una rueda de prensa oficial, ofrecida por un reconocido político vasco, persa, norcoreano, palestino, bolivariano, saharaui, iraquí o cubano… o incluso quizá, por un clérigo musulmán, por citar algún ejemplo hipotético. Supongamos además, que dicho evento tiene lugar justo después de que el compareciente culmine con éxito un ejercicio militar en el que ponga a prueba una formidable arma de destrucción masiva e indiscriminada… por ejemplo: un cazabombardero de última generación.