La lluvia cae sobre el cementerio de la ciudad de Río María. Lágrimas de agua resbalan por la cara de Luzia Canuto mientras lee las lápidas de las personas asesinadas en la lucha por la tierra en esta conflictiva región de la Amazonia brasileña. Primero fue su padre, el líder sindicalista João Canuto, acribillado por 14 balazos de dos pistoleros a sueldo cuando volvía caminando a casa, en 1985, justo tres años antes que Chico Mendes. Luego sus hermanos, Paulo y José Canuto, en 1990, ejecutados en la hacienda Río Vermelho.