Un equipo de cazadores matará unos 80 ejemplares de ballenas beluga que quedaron atrapadas en unos lagos de agua salada en la costa ártica de Canadá. La zona ha quedado completamente helada debido a un fuerte temporal, y los cetáceos no pueden salir a mar abierto, por lo que irán muriendo asfixiadas poco a poco. Para evitarlo,
han decidido matarlas "por piedad". Hace unos años hubo otra historia parecida, pero esta vez las ballenas murieron 'solas':
www.elmundo.es/elmundo/2005/03/04/ciencia/1109961976.html