El último «cuanto estoy dispuesto a pagar por una mierda sin que directamente sea una mierda» es una pulsera. Una pulsera que te ayuda a mantener el equilibrio, a tener más fuerza y flexibilidad y, por qué no, a controlar los excesos de transpiración y halitosis. Nosotros la hemos probado y… Bueno, exactamente no la hemos probado. Vamos que si, pero no la pulsera esa de la que todo el mundo habla, otra parecida y más barata. En fin, que dentro vídeo.