En la actualidad la infidelidad en la pareja, generalmente es causante de rupturas, divorcios y demandas civiles, pero en tiempos del antiguo testamento, la situación se tornaba un tanto más seria, la ley de Moisés explicaba que la forma correcta de castigar a una mujer adultera era la muerte por lapidación. Para los que no saben, la lapidación es un método que si bien, es muy simple en la práctica, causa una lenta agonía. Se trata de un cruel castigo, en el que simplemente se lanzan piedras a una persona hasta que muera.