Un estudiante estadounidense de 17 años fue obligado a buscar una nueva fotografía para el anuario escolar, después de que las autoridades educativas decidieron que una imagen en la que vestía una armadura y blandía una espada iba en contra de las normas de la institución. ¡Coño! En un pais en el que hasta el hijo del apuntador tiene un arma de fuego debajo la almohada.