Se trata de "EVE Online", un popular juego a través de Internet que tiene una moneda propia (Interstellar Kredits) que se puede cambiar por dinero real, y cuenta incluso con sus propios bancos virtuales. El robo fue perpetrado por el entonces director ejecutivo de la entidad EBank, cuyo nombre en el juego es Ricdic, que retiraba fondos y hacía transacciones con pequeñas cantidades de dinero para no ser descubierto, y se embolsó casi 4.000 euros (de los de verdad).