Los grandes medios de comunicación, e incluso los propios gobiernos, abordan con muy poca claridad y con mucho menos pluralismo el análisis de la crisis que nos afecta. Eso confunde a los ciudadanos pero es gracias a esa confusión que pueden ir colocando las medidas que adoptan para favorecer a la banca como si se tratara de las únicas respuestas a la crisis y las mejores para todos.