El ex director financiero de Apple, Fred Anderson, implicó ayer al consejero delegado de la empresa, Steve Jobs, en el escándalo de las acciones sobre acciones concedidas a con fechas rentables para sus titulares (práctica conocida como backdating). De momento, Jobs, el alma máter de Apple, no está siendo investigado por este escándalo. Anderson si lo ha estado y ayer acordó con la SEC (regulador de los mercados) pagar 3,5 millones de dólares en multas aunque no admitió su culpabilidad como sucede normalmente en este tipo de acuerdos.