“Es el acontecimiento más extraordinario del siglo”, se entusiasmaron unos. “Es como si se hubiera filmado la crucifixión de Jesús”, festejaron otros. La noticia cruda afirmaba que un cameraman militar de 82 años le distrajo a la USAF una increíble colección de rollos fílmicos donde dos personas vestidas de médicos parecían practicar una necropsia sobre el cuerpo de un E.T. sobreviviente de la legendaria nave estrellada en el desierto de Roswell, Nuevo México, en junio de 1947. Lee aquí la crónica de un fraude.