Estas palabras nos recuerdan a todos a esos países subdesarrollados de algunos continentes, o a gobiernos pasados, como el de Franco, del que tanto les gusta hablar a los comunistas para justificarse y declararse solemnemente buenos y defensores de los derechos de los "ciudadanos y ciudadanas".La realidad me demuestra una verdad mucho más fea. Es muy fácil ir proclamando ser muy "guay" y engañar y mentir al pueblo.