Aparte del alcohol y algún babeo ocasional, en el rap español se siguen haciendo algunas cosas interesantes. La última propuesta, una delicada mezcla de hip-hop y jazz, proviene de uno de esos pesos pesados del género que se ha ganado por derecho propio todas las alabanzas. Hay que joder con los cánones, los hábitos y las costumbres. Os lo dice Kase.O y él se aplica el cuento: apártense ortodoxos del género, olvídense del bombo-caja, del rap que les gusta solo encontrarán el exquisito falocentrismo de Javier Ibarra.