Cunde la sensación de desánimo por parte del gobierno, “hemos hecho todo lo que hemos podido, y ya está fuera de nuestras manos.” Este mantra lo repiten casi todos los ministros y altos cargos, en público y en privado. Pues bien, hay que decirles bien claro que no es así, en absoluto. Se ha hecho poquísimo para resolver los problemas estructurales que impiden el crecimiento de la economía española. La investigación académica moderna muestra que el crecimiento económico depende de dos cosas básicamente: buenas instituciones y capital humano.