Muchos piensan que, en el fondo, las salas de poker funcionan bajo un esquema piramidal, también conocido como Ponzi, que es el que perpetró Bernard Madoff para estafar a sus clientes, por ejemplo. Según informan ya hasta los medios generalistas, como «The New York Times», Full Tilt dejó un agujero de más de 400 millones de dólares. Dicho dinero, que los clientes creían en un lugar seguro, parece que fue a parar a los bolsillos de los 23 dueños de la sala, entre los que figuran jugadores tan conocidos como Chris Ferguson y Howard Lederer.