Tiene tan sólo dos años pero Ardi Rizal consume 40 cigarrillos por día. El niño, de Sumatra, Indonesia, sufre graves consecuencias en su salud y apenas puede correr. La familia no puede detener el vicio del nene, dado que arma grandes escándalos cuando quieren detenerlo. Su madre, Diana, de 26 años, llora todo el tiempo: “Es totalmente adicto. Si no le doy los cigarrillos, se enoja, grita y se golpea la cabeza contra la pared”. Mohammed, un pescadero de 30 años es el padre del nene y dijo: "Se ve muy saludable para mí, no veo el problema”.