Cada vez soy más consciente de que uno se convierte en lo que mira, en lo que recuerda, en lo que anhela, en lo que transmite. Los personajes que elijo, las palabras que selecciono, invariablemente formarán la urdimbre donde tejeré nuevas respuestas, nuevas realidades.
Ahora sé que el futuro comienza hoy y depende de lo que elijo ver, de lo que me permito decir, de lo que quiero recordar y de lo que decido amar.