Un informe de varias ONG que velan por la transparencia y la privacidad determinó que el Reino Unido tiene más información de sus ciudadanos que China de los chinos. Lo más llamativo es que en el caso de RU son las mismas personas las que vuelcan casi toda su información en internet; las tareas de inteligencia son mínimas. En China, en cambio, se sigue afilando sus sofisticados sistemas de vigilancia e incluso aún se recurre muchísimo a espías clásicos "en persona".
"Los datos filtrados que nos han llegado", continúa el informe, "demuestra que a veces el Estado sabe más que la familia misma de las personas: hay varios casos en donde se supo de enfermedades debido a lo que publicaban y compraban". Al igual que en la película "La vida de los otros" (spoiler alert de este film alemán del 2006, Das Leben der Anderen) un funcionario de corazón blando intervino en la relación de una pareja, en este caso para que no se separen. Supo que todo había sido un malentendido.
Con menos espías y recursos, el Estado británico sabe mucho más que los chinos, vuelven a insistir las ONG. Los datos recabados pueden ser de doble filo: servir para mejorar las políticas públicas o acorralar a algún ciudadano "desviado".