Cuando el puesto de trabajo no está garantizado o se avecinan reducciones de personal por mejoras operativas,los empleados tienden a alargar los tiempos en sus tareas, para aparentar que la carga de trabajo es elevada y por tanto ellos son imprescindibles.
Eso causa una merma en la productividad y menores beneficios empresariales.
Si se desea reducir personal mediante aumentos de productividad y mejoras de procesos, se debe ofrecer cambios de puestos con mejoras salariales ligadas a la optimización del puesto de trabajo anterior.
Si el empleado recibe beneficios por sugerencias de mejora en el puesto que actualmente desempeña, podrá pasar de ser un elemento obstaculizador a un elemento facilitador de la mejora continua en la empresa.