Desde el día 23 hasta el 28 de junio, coincidiendo con la primera ola de calor de este verano, se han producido 100 superaciones del umbral de información por ozono en la Comunidad de Madrid, 45 de ellas en la capital.

La industria del cemento es muy contaminante, ya que expulsa a la atmósfera una gran cantidad de CO₂ (anhídrido carbónico), en torno a un 5% del total. Por esa razón, hay muchas empresas que están buscando materiales alternativos para reemplazar el cemento convencional y poder construir con menor huella de carbono. Sin embargo, CarbonCure ha elegido otro camino, y es el de aprovechar el CO₂ y convertirlo en material de construcción. El producto que genera CarbonCure tiene el aspecto del hormigón convencional; pero con la diferencia de que está complementado con anhídrido carbónico, que se convierte mediante un proceso químico en piedra caliza dentro del hormigón. Por cada bloque de hormigón, se estima que se han evitado 250 gramos de emisión de anhídrido carbónico a la atmósfera.

Decenas de países respaldan un esfuerzo que protegería el 30 por ciento de la tierra y el agua del planeta. Los pueblos indígenas, que a menudo se encuentran entre los administradores más eficaces de la naturaleza, han sido despreciados, o algo peor, en el pasado.