Sabias que se puede fabricar tazas hechas con restos de café y de esta forma generar menos residuos plásticos y aprovechar las borras del café. Esta genial inspiración se la debemos a Julian Lechner que materializo la idea. Pasaba hora en la cafetería con otros compañeros mientras observaba la cantidad de residuos que generaba pedir un simple café ; y tomaban bastantes a diario! Se preguntaba que harían con tantos posos de café y como podría remediarlo.

Hamburgo se ha convertido, oficialmente, en la primera ciudad en prohibir el uso de cápsulas de café en los edificios gubernamentales. Nos referimos a las nespressos, tassimos, dolce gusto y demás monodósis de cafeína que han conquistado buena parte de hogares, oficinas y corazones por todo el globo en los últimos años.