La izquierda esta en el lado bueno de la historia. Esto ocurrió porque aparte de haber mantenido su discurso clásico durante el siglo XX la izquierda occidental ya a mediados del siglo espabiló, y se hizo con los derechos de los derechos humanos, incluso con el derecho a poner más derechos a humanos, a animales y a helicópteros de combate. La derecha llegó tarde, mal, oponiéndose siempre y en muchas cosas se quedó rezagada del mundo moderno.
La izquierda mantuvo su hegemonía sobre el discurso de la igualdad y la solidaridad, se apropio de los valores cristianos de la compasión por los seres humanos y otros animales y a la vez hizo suyos principios básicos del liberalismo, también por eso es la corriente más abierta a lo nuevo y lo inesperado de nuestro universo y por lo tanto es la cosmovisión política más cercana a la ciencia #1. La izquierda es la que responde ante los sorpresivos cambios planetarios generados por el hombre, por un virus o por extraterrestres adoptándolos si son útiles o tratando de evitarlos si son catastróficos, mientras los conservadores son más propensos a negarlos refugiándose en viejos refritos de conspiranoia o en sistemas que, ellos creen, les van a funcionar eternamente. La izquierda es más realista y esta más abierta a la innovación en cuestiones tecnológicas y sociales #2.
Pero sobre todo la izquierda es la que principalmente se ha ocupado de promover derechos y libertades que deberían haber implementado los liberales que nunca tuvimos y que inmediatamente utilizaron los derechosos, o que utilizarán tan rápido como se les pongan. La izquierda es la que continúa promoviendo la defensa de la clase obrera ante la explotación y el abuso, la defensa de los servicios públicos, la que promueve ayudas a las personas pobres, maltratadas o dependientes, la que nos ha hecho avanzar en la igualdad de sexos y en la autonomía y los derechos reproductivos de las mujeres, en la educación sexual, en los anticonceptivos, en los derechos de los LGTB+, en las políticas de tolerancia hacia la diversidad sexual y de convivencia entre las distintas ideologías, religiones y culturas que ahora hacen sus negocios en nuestra sociedad sin necesidad de tener que masacrarse periódicamente, la que continúa promoviendo el laicismo del Estado y la idea de la república, la que sigue hablando de la legalización de las drogas, la que nos ha puesto ahora la eutanasia y próximamente cualquier cosa chula que los conservadores estén deseando hacer, pero que no hacen hasta que alguien de izquierdas les dice que ya pueden hacerlo... o que no pueden hacerlo. Porque la izquierda tiene la superioridad moral.
Mientras la derecha, que sólo puede introducir su moral entre los niños (entre los niños de los coles de curas), ya sólo espera atemorizada la nueva ocurrencia que vaya a tener la izquierda, para acto seguido combatirla con saña y memes idiotas, y después adoptarla como si hubieran llevado con ella toda la vida. Su discurso moral sólo es popular en los mismos puntos en el que el liberalismo nos ha llevado a todos, esto es en conceptos como la libertad y la propiedad. Pero como ahí estamos todos la derecha tiene que seguir haciendo refritos de conspiranoias y relatos cada vez más inverosímiles de la izquierda. Mientras tanto la izquierda es una macedonia que tiene muchas de las mejores frutas de las grandes ideologías #3, cómo no va a tener la superioridad moral.