Ya ha vivido más del doble de su esperanza de vida, y es una de las personas más longevas con su diagnóstico. En lugar de preocuparse por el futuro, Justin se concentra en disfrutar de las pequeñas cosas del presente.
Un investigador de la Fundación Jiménez Díaz y la Universidad Autónoma de Madrid ha descubierto un posible tratamiento contra la progeria, una enfermedad rara que multiplica el envejecimiento de los más pequeños.