El misterioso Monsieur Leborgne pronunció sólo una palabra durante 21 años, mientras que Dora reveló todo en cuestión de 11 semanas. H.M. no podía hacer más que vivir en el presente.
Louis Victor Leborgne, apodado “Tan Tan”, por que esa era la única palabra que podía pronunciar, fue atendido hasta su muerte el 17 de abril de 1861 por el neurólogo Paul Pierre Broca.