Francisco Javier Núñez sufrió una agonía de trece días después de que dos policías le golpearan, le torturaran y le obligaran a beber coñac y aceite de ricino. Víctima reconocida de abusos policiales, su viuda y su hija cuentan su historia.
Resulta que en una videollamada o en una llamada tradicional de las de toda la vida la gente se atreve más a mentir que en las redes sociales, en los mensajes de texto o enviando mails. Como puedes ver en el gráfico, donde menos mentiras decimos es cuando enviamos correos electrónicos. Y hay más mentiras en una conversación cara a cara que en las redes sociales o en los mensajes escritos.