A pesar de la creencia popular de que los gatos son nocturnos, en realidad son animales crepusculares, es decir, son más activos durante el amanecer y el anochecer. Esta tendencia natural puede hacer que los gatos estén más activos (y, por tanto, vocales) justo cuando sus dueños intentan dormir. Por otro lado, el maullido excesivo puede deberse a que el gato está aburrido o no ha tenido suficiente estimulación durante el día. Los gatos necesitan actividades que mantengan su mente y cuerpo ocupados.

Los gatos no maullan para comunicarse con otros gatos: maúlan para comunicarse con los humanos. Por consiguiente, ¿qué están tratando de decir exactamente? No lo sabemos todavía, pero empezamos a discifrar las claves de su lenguaje: es mucho más complejo de lo que parece y depende del dialecto que hable su dueño, según aspira a determinar una nueva investigación.

Dr John Bradshaw explica por qué los gatos domésticos maullan constantemente a sus dueños. Extracto de "Cats Uncovered" de BBC Earth.