Shane Griffin, es un joven director y artista nacido en Irlanda quien ahora vive en Nueva York, es un pionero en el mundo digital del arte. Su trabajo, que podría rayar en lo comercial y que a veces pareciera carente de contenido porque le da prioridad a la forma, abarca una amplia gama de disciplinas. Va desde la animación y el live action, hasta escultura y CGI (computer-generated imagery o imágenes generadas por computadora).