Durante mucho tiempo en nuestro país se ha considerado a la bicicleta como un utensilio para el ocio para uso veraniego, como algo del pasado en cuanto a medio de transporte. Pero la bicicleta es el único medio de transporte que, tras un claro declive, ve resurgir su uso, debido a sus indudables bondades en términos de eficacia en la movilidad, ahorro energético, salud y economía. Pasaron aquellos tiempos en los que teníamos que mirar hacia Europa para imaginar cómo sería una ciudad llena de bicicletas.