El gobierno cubano financiará la mitad de la ayuda a afectados por Irma. Para cubrir los costos de la otra mitad de la reconstrucción, los damnificados podrán solicitar créditos bancarios con bajas tasas de interés y mayores plazos de pago, y en los casos de derrumbes totales de viviendas y techos, será el Estado quien asuma el pago de los intereses al banco.