Hace unos años el Gobierno de Aragón hizo intención de cambiar su escudo en 2004 después de que la comunidad musulmana de Zaragoza expresase su malestar, ya que el el tercer cuadrito (en su tercer cuartel, si usamos el término heráldico) aparecen cuatro cabezas de moros cortadas. Este cuartel es igual al escudo de Cerdeña: una cruz de San Jorge que separa las cuatro testas, y que remite a la batalla de Alcoraz en la cual se reconquistó la ciudad de Huesca (presuntamente con la ayuda de San Jorge). Helo aquí:
Si profundizamos un poco en la heráldica española no es raro encontrar de vez en cuando emblemas con musulmanes que han corrido diversa suerte. Las cabezas de moro son uno de los motivos más documentados y son símbolo de pueblos pero también de familias.
Diversas asociaciones musulmanas han expresado su descontento con estos símbolos y han obtenido resultados dispares. Por ejemplo, el Estatuto aragonés de 2002 recoge que las cuatro cabezas son símbolo del “anhelo de convivencia” de los aragoneses y de hecho el escudo no se ha cambiado.
El caso de Vélez-Málaga
En la localidad malagueña de Vélez-Málaga tenemos otro digno de contar, ya que en su escudo, que data de 1499, aparecía Fernando el Católico participando en una de las batallas de la conquista de Granada (la única en la que participó) y delante de su caballo aparecía de nuevo una figura con un turbante y con una lanza clavada. En 2012, el alcalde del PP que gobernaba la ciudad gastó 37.000 euros en dotar a la ciudad de una nueva imagen corporativa “más moderna” ya que no quería firmar documentos oficiales en los que apareciera un musulmán atracesado por una lanza.
El nuevo escudo se sigue usando en muchos lugares como las redes sociales del Ayuntamiento, pese a que el Gobierno ha cambiado y ha derogado algunas de las disposiciones del anterior edil (como la supresión del guion en el nombre de la localidad). En la nueva imagen ya solo vemos la silueta de Fernando el Católico con la espada en alto y ni rastro de los otros personajes que pueblan el símbolo de la localidad.
Un movimiento similar se ha realizado en Valdemoro (Madrid) donde el tradicional escudo con el rey moro encadenado a la torre se ha cambiado por una versión más simplificada en la que ya no se representa al cautivo con los atributos de ninguna religión. Además se ha pasado de una heráldica a todo color a un logotipo en blanco y negro.
Musulmanes en son de paz: Aznalcóllar
La localidad sevillana de Aznalcóllar también tiene a un personaje tocado con un turbante en su escudo. En este caso está en la parte superior de la torre y sostiene en las manos una rama de olivo.
Aunque tradicionalmente se tiende a pensar que la ciudad se rindió durante la reconquista (y de ahí el símbolo pacífico que el señor sostiene en sus manos), lo cierto es que los musulmanes que vivían en este pueblo huyeron o murieron heroicamente. O al menos así lo explican en su Ayuntamiento.
Un musulmán que aparece y desaparece en Alcázar de San Juan
Un caso muy curioso es el de Alcázar de San Juan en cuyo escudo original solo aparece un caballero, montado en un caballo rampante, delante de una torre. Así ha sido desde el siglo XIII, excepto en los años 50 del siglo pasado en los que se incorporó al mismo una figura enturbantada a los pies del caballero (un moro vencido decían).
En este caso, en los años 80 se volvió al escudo original y en efecto no es bastante común encontrarte con el anterior escudo.
