De Asimov a Zelazny: 25 recomendaciones de relatos clásicos de Fantasía y Ciencia Ficción(1940-1980)

¡ Cómo nos gusta a los aficionados a la Fantasía y la Ciencia Ficción fanfarronear de todo lo que hemos leído! Creemos conocer todo lo que hay que saber sobre los clásicos del género y se nos llena la boca cuando mencionamos con voz engolada los nombres de famosas novelas del estilo de 1984, Dune, Fundación, El Señor de los Anillos, El juego de Ender, Hiperión o tantas otras, y dejamos caer en las conversaciones, como sin querer, que uno no es un verdadero fan si no las ha leído absolutamente todas.

Pero resulta que conocer y haber leído estas famosas novelas no implica abarcar en absoluto la obra de esos autores y de otros tantos de una envergadura similar, autores cuya mayor aportación a la literatura quizás no hayan sido las novelas ni las trilogías o las sagas; sino que por el contrario lo han sido historias de un tamaño más reducido en número de palabras, pero no así en calidad literaria. Me estoy refiriendo a los relatos o cuentos ( entendiendo por ello toda ficción de una estructura escrita más corta que la novela, formato que artificialmente se divide -a la hora de los más prestigiosos premios- en relato corto, relato y novela corta). Para entendernos serían aquellas historias que se leen entre un mínimo de unos cinco minutos y un máximo de poco más de una hora y media. Y son los relatos, en su mayor parte, los grandes desconocidos del público lector, ya que existe una gran parte de aficionados al género tanto de Fantasía como de Ciencia Ficción que no conocen prácticamente nada de los autores más representativos si se les saca de las novelas.

¿Por qué sucede esto? Muy posiblemente lo que el público demanda y lo que los editores prefieren no es el relato, ni siquiera editado en las antologías de varios autores tan comunes hace algunos años. Es muy preferible -a nivel crematístico- captar al lector presentándole enormes volúmenes perfectamente encuadernados en tapa dura de más de quinientas páginas cada uno y que ofrecen continuidad en trilogías, tetralogías o vaya usted a saber que, vendiéndolos a veintimuchos euros cada uno y de esta forma conseguir fidelizar al lector que acaba comprando el producto final por un monto total de más de cien euros. Los formatos que no dan para eso no son muy apreciados por las editoriales, en un mercado como el del libro de F y Cf en castellano que, con unas tiradas muy inferiores al poderoso mercado del libro en inglés, necesitan de un mayor margen de beneficio en cada ejemplar vendido para ser rentables.

Y eso que al principio fue el relato el medio que tenían tanto editores como autores para darse a conocer... eran las revistas estadounidenses de gran tirada como Astounding, Amazing Stories, Fantasy&SFiction, Galaxy y posteriormente otras como Locus, las que crearon el despertar del lector a estos géneros; de forma que todos los grandes creadores de lengua inglesa tanto británicos como estadounidenses han tenido que destacar en mayor o menor medida en los relatos publicados en ellas. Es decir, casi la totalidad de escritores han tenido que hacerse un nombre con los relatos publicados en revistas especializadas, previamente en muchos de ellos a la publicación de sus propias novelas.

Aquí en España, este tipo de publicaciones fueron muy populares en los años ´70 y ´80 del siglo pasado, en parte debido a las antologías de editoriales como Bruguera con títulos como “ Los mejores relatos de anticipación” o posteriormente Martínez Roca o NOVA con la publicación de los premios Hugo o Nébula, o “ Lo mejor de Isaac Asimov Science Fiction Magazine”; pero sobre todo gracias a una revista muy valorada por los fans de esa época como fue Nueva Dimensión, revista especializada que con cada número nuevo presentaba cuatro o cinco grandes historias de famosos escritores con relatos premiados y alguna más de escritores en castellano y menos conocidos, tales como sus editores Domingo Santos y Luís Vigil ( o incluso gente ajena a este mundillo como Luís Eduardo Aute o José Luís Garci, que también se animaron a publicar en ND).

¿ Y cual es el panorama hoy en día? No muy alentador para los relatos de mediados/finales del Siglo XX. Por supuesto que es cierto que algunos de los relatos de autores actuales si que son editados y leídos, relatos de gente muy destacada y que sin dudarlo se sitúan a la altura de los escritores más clásicos, es decir creadores como por ejemplo Ted Chiang y Alastair Reynolds en ciencia ficción o Neil Gaiman y Joe Abercrombie en fantasía . Pero no todos los lectores asiduos al género podrían mencionar muchos títulos de relatos anteriores, tal vez los relatos de robots de Asimov, quizás los más conocidos de H.P. Lovecraft o Robert E. Howard, Los mil millones de nombre de Dios de Arthur C. Clarke, Los reyes de la arena de G.R.R. Martin, Dios microscópico de Theodore Sturgeon, Flores para Algernon de Daniel Keyes, El dia millón de Frederik Pohl, Enemigo mío de Barry B. Longyear, Hijo de la sangre de Octavia Buttler, Luchacruenta de Greg Bear y puede que algún puñado más.

Creo que es un error menospreciar al relato como un pariente menor y no especialmente agraciado de la novela, al estilo de lo que sucede en el cine con los cortometrajes. En la literatura son ambos formatos en los que los grandes creadores destacan, y desde luego es bastante evidente que escribir un buen relato no está al alcance de cualquiera; no se puede hacer una enorme descripción de personajes, del entorno o de las motivaciones personales; ni plantear presentación, nudo y desenlace al estilo más ortodoxo. Hay que hilar muy fino e ir al grano, que enganche al lector, y siempre guardar algún as en la manga para poder afrontar con garantías un final explosivo o inesperado, que sea sorprendente y cuando sea posible mejor recurrir al humor. No parece muy sencillo. Podría decirse, como en el eslogan de un conocido anuncio de colonia de los ´80 que, en las distancias cortas, es donde un escritor de F y Cf se la juega.

Es evidente que novela y relato están muy relacionados entre sí: muchos de las más grandes sagas de la F y Cf (p.e. Fundación de Asimov, La tierra moribunda de Jack Vance) fueron gestadas mediante la publicación de varios o todos sus relatos constituyentes en las revistas al estilo folletinesco del siglo XIX tan utilizado por grandes autores como Dickens o Dumas; otros fueron gérmenes de novelas ampliando la longitud del escrito ( Flores para Algernon de Daniel Keyes, premiada en su versión de relato y también en la novela, El Mundo del Río de Philip José Farmer); famosas obras se forjaron uniendo distintos relatos vagamente relacionados entre ellos, pero aparentemente escritos por diferentes narradores formando un rompecabezas ( La quinta cabeza de Cerbero de Gene Wolfe) y muchos los maravillosos libros de Stanislav Lem ( p.e. Ciberíada, Diarios de las estrellas o Las aventuras del Piloto Pirx) realmente están formados por multitud de relatos íntimamente interconectados pero que funcionan también perfectamente por separado al leerlos como relatos individuales e independientes. Tal vez el ejemplo más extremo de hipertrofia a partir de un relato es la saga de La Torre Oscura de Stephen King, que partiendo inicialmente de un pequeño escrito, El pistolero, publicado en 1978 se llega hasta la publicación de los ocho volúmenes conocidos.

Es por todo ello que creo que existe una enorme cantidad de relatos anteriores a 1980, que son mayormente ajenos a los lectores actuales, estando la mayor parte de ellos descatalogados y sin posibilidad alguna de ser rescatados por las editoriales; aunque como casi todo en la actualidad sí se encuentran buscando en Internet. Aprovechando este artículo y rebuscando en mi biblioteca de aficionado veterano me voy a permitir recomendar una serie de ellos, en total veinticinco relatos, intentando en lo posible no mencionar más de uno por autor, proponiendo narraciones que no sean las más famosas de ese escritor en concreto y tratando además de incluir alguno desconocido en España.

Ésta no pretende ser absoluto una lista de los 25 mejores, solamente se trata de intentar poner en valor unas obras algo olvidadas en la actualidad. Las que menciono en esta lista están aquí porque en su momento me impactaron y/o me hicieron reir . Estoy seguro que mucha gente podría - y puede - proponer otros tantos relatos e incluso mejores, a lo cual os animo ya desde aquí:

1.-Navidad en Ganímedes de Isaac Asimov ( 1940). Escoger uno solo es tarea titánica, éste tiene ese humor del primer Asimov. Más conocidas entre centenares son: Anochecer o El hombre Bicentenario.

2.-Liane el Caminante de Jack Vance ( 1950). Incluido en La Tierra moribunda. Más renombradas son, por ejemplo: La polilla lunar o El último castillo.

3.-El cohete de Ray Bradbury ( 1951). Triste, poética y esperanzadora por partes iguales. Imprescindibles de Bradbury: Caerán lluvias suaves o cualquiera incluída en Crónicas Marcianas.

4.-Tensión superficial de James Blish ( 1952). La colonización planetaria a otra escala.

5.-La caricia de tu mano de Theodore Sturgeon ( 1953). La regresión tecnológica, tema clásico entre los clásicos, y Sturgeon lo era.

6.-Humano es de Philip K. Dick ( 1953). Las temáticas de Dick presentes también en relatos. Otros significativos en una enorme producción de gran calidad: La segunda variedad o El padre-cosa.

7.-El examen de Richard Matheson (1954). Algunos exámenes son más duros que otros.

8.-Prohibida la entrada de Fredric Brown ( 1954). ¡ Marte para los marcianos! El relato por el que es más conocido Brown es Arena.

9.-Axolotl de Julio Cortázar ( 1956). En castellano también se escriben grandes relatos. La autopista del sur es otro de sus imprescindibles entre muchos.

10.-Un asunto de gravedad de Arthur C. Clarke ( 1956). Como Asimov, un grande que destaca también con sus relatos en clave de humor. La estrella , de temática mucho más seria, quizás sea el más famoso.

11.-La guerra ha terminado de Algys Budrys ( 1957). Original e indescriptible.

12.-Los cangrejos caminan sobre la isla de Anatoli Dneprov -seudónimo del físico soviético A.P. Mitskevich- ( 1958). Darwinismo robótico en la URSS.

13.-Todos vosotros zombies de Robert A.Heinlein (1959). Muy conocido (y sorprendente) de uno de los más grandes.

14.-Mensajero del futuro de Poul Anderson (1961). El futuro aún no ha llegado pero ya tiene sus propios problemas.

15.-La mansión de las rosas de Thomas Burnett Swann ( 1966). Fantasía en la época de las cruzadas, Swann muy poco conocido en España, tiene un estilo reconocible y que merece la pena.

16.-El sexto palacio de Robert Silverberg ( 1966). El saber no ocupa lugar. Entre una ingente producción, destaca Rumbo a Bizancio.

17.-Voy a probar suerte de Fritz Leiber ( 1967). Multipremiado relato de otro grande. Posiblemente el más conocido suyo sea Aciago encuentro en Lankhmar.

18.-Un muchacho y su perro de Harlan Ellison ( 1969). Profundamente transgresora. Otras obras muy famosas: No tengo boca y debo gritar o ¡ Arrepiéntete, Arlequín! dijo el señor Tic-tac.

19.-Soy la puerta de Stephen King ( 1971). El maestro del terror escribe ciencia ficción como el mejor. Toda su obra es enormemente conocida ( sus relatos también y nunca están descatalogados).

20.-Los que se alejan de Omelas de Ursula K. Le Guin ( 1973). Lo más parecido a un cuento moral dentro del género. Los relatos más reconocibles de la comprometida Le Guin son posiblemente El nombre del mundo es Bosque o Nueve vidas.

21.-El regreso del verdugo de Roger Zelazny ( 1975). Todos buscamos respuestas a grandes preguntas. Una rosa para el Eclesiastés es posiblemente el relato más famoso - entre muchísimos - del gran Zelazny.

22.- Utopía de un hombre que está cansado de Jorge Luís Borges ( 1975). Cualquier relato del genial Borges es muy recomendable. El Aleph o El inmortal son tal vez de los más renombrados.

23.-El camino de la luz y el dragón de G.R.R. Martin ( 1980). Religión y ciencia ficción caminan unidas. Martin no es precisamente un desconocido en las distancias cortas: Los reyes de la arena o Una canción para Lya.

24.-La capa y la vara de Gordon R. Dickson ( 1980). La resistencia terrestre se organiza. Gordon fue célebre por sus relatos sobre los Dorsai.

25.- Una cabaña en la costa de Gene Wolfe ( 1980). Las cosas no son lo que parecen ( y menos con Wolfe). La quinta cabeza de Cerbero o La isla del doctor Muerte y otras historias son algunos imprescindibles de Wolfe, otro de los más grandes.

Permitidme también que -fuera de lista- mencione también este asombroso relato clásico, aunque no esté en absoluto circunscrito al marco temporal de este artículo :

La desaparición de Horoné Subrac de Gillaume Apollinaire ( 1910). Un gran poeta francés escribiendo un relato sobrenatural.

Creo que en la Red todos se pueden encontrar sin mayor dificultad. Los grandes autores merecen siempre la pena y la mayoría de los relatos no requieren ni tan siquiera media hora de dedicación por parte del lector menos comprometido con la causa.

¡ Ánimo y disfrutad!