En el humor, hay una fina línea que separa la sátira de la propaganda. La diferencia suele ser que la sátira es, por su naturaleza, una interpretación de la realidad con tintes humorísticos, mientras que la propaganda construye su propia verdad. Evidentemente, Israel no está libre de esta propaganda, lo que explica la adhesión que existe por buena parte de la población a los postulados de su gobierno. Lo que no mucha gente sabe es que esta propaganda también viene disfrada de humor.
Existe en Israel un programa humorístico de televisión llamado Eretz Nehederet (Un País Maravilloso) que, para el lector más habitual de Menéame, tiene un formato que podría definirse como una mezcla entre El Intermedio y Polònia, con comentarios y sketches sobre la actualidad. El programa se emite en hebreo, pero para algunos de sus sketches (aquellos en el contexto de la anglosfera) utilizan el inglés, gracias también al buen conocimiento de este idioma por la población israelí en general.
Como tratar de traducir y explicar del hebreo dichos sketches es una tarea excesivamente laboriosa, voy a enlazar dos vídeos completamente en inglés, aduciendo también al buen nivel general de inglés de los meneantes.
En el primero, se muestra a una falsa BBC reportando el bombardeo de un hospital, desde una posición pro-Hamas y anti-israelí, ignorando los datos de inteligencia estadounidenses y exagerando las cifras.
En el segundo sketch, tenemos una parodia de dos estudiantes americanos "liberales" de la ficticia Columbia Untisemity (un juego de palabras con la Columbia University) como crítica a la moral occidental. Éstos apoyan abiertamente a Hamas, destilan anti-judaismo e incluso entrevistan a un terrorista de Hamas, que les amenaza con tirarles desde un tejado por ser homosexuales y de atacar Estados Unidos tras acabar con Israel:
Creo que no hay que ser un lince para observar que esa línea entre la sátira y la propaganda no es que la hayan cruzado, sino que se la han saltado con una rampa y una moto de cross. Es tan burdo que, tras ver los vídeos, no creo que haya que explicar por qué. Además, este programa es uno de los de mayor audiencia en su franja de emisión y estilo, lo que explica en gran parte la posición de buena parte de la población de Israel (y lo que "no es Israel") sobre el conflicto y muchas de las declaraciones de tintes salvajes y genocidas que desde allí nos llegan.
From the river to the sea! Turn off the damn TV!