Ayer viernes escribía un artículo sobre un rumor: los rusos había lanzado un ataque en el frente Norte y había abierto un nuevo frente. En principio, la cosa sonaba dudosa, y aún se sigue discutiendo la magnitud del ataque, su alcance, y muy en especial sus intenciones, pero ya está confirmado.
El mapa es de @Suriyak. En rojo aparecen las localidades bajo control ruso, en azul las que permanecen bajo control ucraniano, en naranja las que se están disputando y en blanco, o gris, aquellas en las que nada está claro y es mejor no decir nada.
Según parece, los ucranianos desplazan tropas a toda prisa desde el frente de Avdivka para tapar esta brecha, y esa, según muchos analistas, es la intención de los rusos: ampliar el frente para tensionar las ya escasas reservas ucranianas. Se dice, incluso, y esto ya os lo cuento como rumor, que en los próximos días o semanas se espera un nuevo ataque de las mismas características en las inmediaciones de Sumy, más al Oeste, para alargar aún más la línea del frente.
La cuestión, ahora, es si los rusos planean mantener este frente o abandonarlo en poco tiempo, una vez conseguido su objetivo de obligar a las tropas ucranianas a moverse, pues es precisamente durante estos desplazamientos a campo abierto cuando resultan más vulnerables a los ataques aéreos.
Sea como fuere, la apertura de un nuevo frente tiene consecuencias tácticas de gran envergadura, y más aún a nivel estratégico. Si los ucranianos no detienen este ataque, corren el riesgo de que los rusos lleguen por el Oeste al río Oskil, lo que sería catastrófico. Y si lo hacen, se verán obligados a debilitar otros frentes donde ahora mismo las cosas están al rojo vivo.
Por mi parte, sigue pareciéndome muy extraño que los rusos no hayan atacado un poco más al Este, donde podrían hacer mucho más daño, pero parece que la lógica de Gerasimov no pasa tanto por conquistar territorios como por destruir las unidades enemigas, muy en la estela de Rommel, que decía que conquistar kilómetros de desierto era una estupidez, porque lo que importaba era destruir unidades enemigas, como si de en una batalla naval se tratase. ¿Quién quiere conquistar el mar? Lo importante es hundir los barcos. De ahí que en broma, a veces, le llamasen Almirante Rommel.
La cosa va por ahí, parece. Pero sigue habiendo demasiados puntos blancos.
En los próximos días veremos lo que ocurre.