Con vuestro permiso, expongo el caso.
Hace unos días llegaba a portada esta noticia: Nueva polémica con una ciclista transgénero: Leia Genis gana una medalla de plata y EEUU se la quita
A lo que comento:
#3 Ahí está la cuestión. Es un hombre, un hombre operado y hormonado para parecerse a una mujer, travestismo médico y quirúrgico. Cuando no existían esos medios, el travestismo se limitaba a la ropa y el pelo.
Que cada uno hace con su cuerpo y su vida lo que quiere, y a los demás sólo nos queda respetar sus decisiones. Pero obligarnos a creer su ficción, su fantasía? Eso sí que no. Si fuera una mujer, no tendría que operarse y hormonarse para parecerlo.
Hasta aquí el sexo. El género es otra cosa, es un convencionalismo social, que se puede aceptar o no. En algunas sociedades llevar falda es cosa de mujeres, en otra de hombres. El pelo largo, realizar ciertos trabajos como la cocina...
Me reafirmo punto por punto lo antedicho, excepto que me falta un signo de apertura de interrogación, y que me faltó por añadir una puntualización inexcusable: este respeto a las decisiones sobre su propio cuerpo debe limitarse a mayores de edad. Un niño debe tener derecho a equivocarse y rectificar, y no tomar (influenciado muchas veces por su entorno) decisiones de consecuencias permanentes. Y esto vale tanto para profesar en una orden monástica como promueven los Kikos en su macroeventos, o someterse a una cirugía de emasculación.
La cuestión que nos lleva aquí es que a ese mensaje le sigue un:
Penalización / Motivo: strike3 / Incitación al odio
Karma anterior / durante penalización / final: 10.63 / 4.01 / 5.32
Inicio / Fin: 2022-08-18 10:11:26 » 2022-08-23 10:11:26
Y mi comentario deja de ser visible, así como el del compañero #3 al que contestaba. La comunidad había votado 30 veces mi comentario y valorado con 270 puntos, y del cual colgaban otros 5 otros comentarios, en un sentido u otro.
Hay una polémica (según narra el artículo enlazado), pero sólo uno de los bandos es legítimo. En el que milita el minusválido intelectual y escombrito moral que va tapando bocas y poniendo strikes, por supuesto. Ya no hay polémica. Disuélvanse.
Y bien. ¿Qué nos dice esta actuación? Hay un individuo, al que la han dado poder, que usa ese poder para restringir el debate, eliminando el punto de vista contrario con fervor justiciero, pues el muy zote, imbuido del nuevo mesianismo postmoderno, considera que sólo su punto de vista es el correcto. En este caso, la teoría Queer, por la cual no sólo el género, sino el sexo es un constructo social, y que puede alterarse a voluntad del interesado sólo con afirmarlo. De hecho, toda la realidad es puesta en duda en la pseudofilosofía de Foucault y Darrida, rebatiendo el criterio de verdad y reduciéndolo todo a la asunción del relato. Si crees que la Tierra es plana, pues será plana, mientras que, al mismo tiempo, también es redonda si otro así lo cree. La realidad es un producto de las convenciones sociales y la ciencia, una ideología del colonialismo blanco heteropatriarcal, tan válida como la Pachamama o cualquier otro conocimiento tradicional.
Todo esto es obviamente una patochada, o al menos debería ser obvio para quien tenga una formación académica mínimamente solvente, un bachillerato decentito, pero como decía en el comentario con el travestismo quirúrgico, allá cada cual con los postulados que defiende. Lejos de mi voluntad acallar estos rebuznos en un debate público por la vía de la censura. ¿Pero tolerar, y hacerlo en silencio, que un ser intelectualmente inferior use su posición de poder para coronar su doctrina como la única legítima (si dice que es mujer, es mujer ¿y si dice que es elefante?) y elimine mi mensaje y pretenda castigarme por mi impiedad? Eso sí que no. No me callaba con las botaratadas de los católicos en mi juventud, que al menos se asientan sobre una sólida base teológica (la teología viene a ser algo así como la veterinaria de los unicornios) desarrollada durante siglos por gente sin duda intelectualmente solvente, no me voy a callar por una panda de analfabetitos integrales con el pecho henchidito de fervor religioso y pulsiones autoritarias para acallar allá donde pueden las posiciones que cuestionan su dogma.
El interfecto podría haberse sumado al debate, aportando como buenamente pudiera su disconformidad con mi comentario. Pero una característica de los activistas postmodernos es su terror por la libertad (pobre Erich Fromm, si levantase la cabeza para ver estos ridículos personajillos), como lo son los fieles de cualquier otro credo, tanto más vehementes y liberticidas cuando más estúpidos y grotescos son sus dogmas (con el islam salafista, que es lo mismo hoy en día que decir islam suní merced a los petrodólares, tenemos un magnífico ejemplo). Por lo tanto, en lugar de debatir, optó por usar su parcelita de poder (tema central en Foucault) para silenciar y reprimir, y hacerlo en base a una falsedad. ¿Incitación al odio en mi mensaje? Eso lo podría haber escrito el alumno de una madrasa, lleno de odio ante un comentario contrario a su libro sagrado. Efectivamente, cualquier comentario que rebate sus dogmas y ridiculiza su credo estimula el odio de éstos. Pero no porque la naturaleza del comentario sino de su propio fanatismo y su cobardía initelectual asociada, que socava su capacidad para aceptar otros puntos de vista.
Como se suele decir: Si no quieres que me ría de tus creencias, no tengas unas creencias tan ridículas.
Por lo tanto, quiero advertir sobre la Santa Cruzada que pretenden desarrollar estos neocatecúmenos woke, y el uso espureo que harán de cualquier parcelita de poder que detenten para imponer su dogma. Si los pones de admin en una página censurarán, si tienen poder legislativo criminalizarán la disensión, y no sabemos lo que harían de contar con fuerza armada. Esta marabunta que ha tomado al asalto los partidos y organizaciones de izquierda, representa el espacio social e ideológico que hace unos años ocupaban los catequistas y militantes de Fuerza Nueva. Son pocos, pero muy organizados y convencidos de estar en posesión de la verdad absoluta. Más proselitistas que un Testículo de Jehová o un vegano, moverán todas las palancas a su alcance para convertir sus desvaríos en hegemonía cultural: ya cuentan para ello con la ayuda inestimable de los medios (son el caballo de Troya que va a destruir por una generación a la izquierda, las élites oligárquicas están encantadas pues este sucedáneo revolucionario les resulta inofensivo), y son mayoría en campos como la enseñanza y las humanidades (cómo se nota la nota de corte).
Poca broma con estos nuevos meapilas, nos estamos jugando nuestra libertad.
Este foro es parte de un negocio privado, y corresponde a sus propietarios decidir a quien le confieren el uso de la porra a cambio de unos cacahuetes. En nuestra mano está votar con los pies, para lo cual sugiero usar plataformas con un mayor respeto a la libertad de opinión, que puede no sea exquisito, pero sí muy superior a la presente. Me estoy refiriendo a Reddit y sus foros en castellano (y los generales en inglés, vaya), y estoy ávido de leer nuevas sugerencias.
Un saludo a todos los compañeros, también a los que no piensan como yo; especialmente a éstos, porque sin el ruido de las hachas esto sería un coñazo.
¡Salud y libertad!