La verdad es que escribo este artículo desde la rabia que me produce ver como determinados miembros de Podemos están tirando por tierra toda la imagen de la izquierda y por tanto de sus políticas, las cuales en su mayoría defiendo, y con las que me siento identificado.
Ayer, en la manifestación del 8-m, la secretaria de estado para igualdad "Pam" se grababa y publicaba un vídeo donde aparece en un grupo en el que corean "Qué pena me da, que la madre de Abascal no pudiera abortar".
Vaya por delante que el personaje Abascal me queda en las antípodas de absolutamente todo, y que groserías por parte de Vox las escuchamos a diario, pero coño, digo yo que no habrá que ponerse a la altura ¿no?.
Que una secretaria de estado tenga tan poca clase de ponerse junto a personas que corean esto es grave, pero que encima sea tan poco inteligente para grabarse y subirlo a las redes sociales es de traca.
Hay que agradecerle que ha dado carnaza a los medios para que hoy tengan un tema para desviar la atención.
La imagen que transmite Irene Montero, con su tono de cabreo constante, Irene Belarra, con sus esloganes de manifa en vez de ministra, las salidas de tono de "Pam" o las hipérboles de Echenique dejan a Podemos por los suelos, y por extensión a la izquierda.
Pero bueno, parece que les da igual, viven en su realidad paralela donde deben creer que de algún modo esto les favorece.
En el fondo pienso que lo único que buscan es dejar su sello, pero no construir un país mejor a lo largo de los años, por eso les da igual si joden a la izquierda en las próximas elecciones, ell@s ya han dejado su sellito.