Un artista crea un musical para manipular la historia y mostrar que España no esclavizó América.
Para ponerlo en marcha esclaviza americanos en situación ilegal y es detenido.
Es defendido por una política que se posiciona en contra de la inmigración ilegal porque "nos hace perder un dinero público necesario para los españoles".
La política y el artista comparan la actuación de la policía con el estalinismo o la Stasi, la policía de la Alemania comunista que espiaba a ciudadanos.
Horas después se conoce que el partido al que pertenece la política usó de forma sistemática a la policía para espiar ilegalmente a rivales políticos y todo pagado con ese dinero público tan "necesario para los españoles".