-O sea que te arriesgaste a ser feliz, incluso sabiendo que después estarías triste.
-Sí.
-Y ahora...estás triste.
-Sí...
-Entonces...¿cuál es el problema?
-Estoy demasiado triste. Mire, a mí me gustaba la sensación de estar enamorado de ella, me gustaba. Pero ahora se ha ido y la echo de menos y es terrible. Y pensaba que no iba a ser tan malo y me pregunto, ¿por qué ser feliz alguna vez si después te vas a sentir así? No vale la pena, no valía la pena.
-Oh chico, "la miseria no es apreciada por el miserable".
-¿Qué?
-Bueno, no estoy muy seguro de como te llamas pero eres el clásico idiota de libro. ¿Crees que pasar el tiempo con ella, besándola, pasándotelo bien con ella...crees que eso fue todo? ¿Que eso era el amor?
-Sí...
-Esto es amor, la has perdido. Ella se ha ido, tu te quieres morir, eres...tan afortunado. Eres como un poema andante. ¿Preferirías tener algún tipo de fantasía? ¿Una especie de...de viaje a Disneyland? ¿Es eso lo que quieres? No lo ves, esta es la parte buena. Es lo que has estado buscando todo el tiempo. Ahora finalmente lo tienes en tu mano, la dulce pepita del amor. Dulce, triste amor y lo quieres echar al traste. Lo has entendido todo mal.
-Pensaba que esta era la parte mala.
-¡No! La parte mala es cuando la olvidas, cuando ya no te importa. Cuando no te importa nada. La parte mala vendrá, así que disfruta del dolor mientras puedas, por Dios Santo...coge la mierda de perro, por favor, ¿serías tan amable de coger la mierda que acaba de cagar mi perro? Gracias por recogerla, suertudo hijo de puta. No me han roto el corazón desde que Marilyn me dejó, desde que tenía...tenía 35 años. Cómo me gustaría tener esa sensación de nuevo. ¿Sabes? No estoy muy seguro de cómo te llamas, pero, puede que seas la persona abandonada más aburrida que he conocido jamás. No te ofendas, dame el perro. No te hundas.