Amenaza de marcha independentista sobre los muros (aún en proyecto) de Murcia: así sucedió

Ayer era el Entierro de la Sardina en Murcia. Es un desfile donde el papel principal lo tienen unas carrozas desde las que se lanzan juguetes de Todo a Cien (pistolas de agua, pelotas...) al público que observa. Coincidiendo con ello, la Delegación del Gobierno informó de que varios autobuses llenos de "separatistas antisistema" se dirigían a la ciudad para sumarse a las protestas pro-soterramiento que ese día iban a realizarse en la zona de las obras del AVE.

Como es sabido, el proyecto de llegada del AVE a Murcia pretendía que éste pasara sobre la superficie, lo cual implicaba elevar un muro que partiría por la mitad nuestra ciudad, con el consiguiente perjuicio para los vecinos de la zona que quedaría "extra muros" y marginada del centro.

Ello ha provocado una movilización ciudadana nunca vista por estas tierras, que ha dado lugar a las manifestaciones más multitudinarias que se recuerdan en Murcia www.soterramientomurcia.es/manifestacion-30s/ Y también a la imposición de sanciones arbitrarias y masivas a los vecinos que luchan para que el muro no se construya y el AVE pase soterrado por la ciudad. Por si no fuera bastante, dichas sanciones van acompañadas de las bravatas chulescas del Delegado del Gobierno cadenaser.com/emisora/2018/03/09/radio_murcia/1520583623_377766.html

A día de hoy, el Gobierno ha cambiado su discurso y dice que acepta el soterramiento. Pero las obras que se están realizando en la zona, hacen desconfiar a los vecinos con toda la razón www.eldiario.es/murcia/sociedad/Instalan-pasarela-peatonal-atravesara-

Pues bien, la llegada de los "autobuses independentistas" para unirse a las protestas, provocó una oleada de especulaciones en el PP murciano y sus satélites, que enseguida elucubraron sobre los disturbios derivados de la presencia de los "antisistema" www.laverdad.es/murcia/murcia-triplica-vigilancia-20180407020318-ntvo.

Y llegaron los "independentistas". Que realmente no lo eran, al menos en gran parte. Desembarcaron andaluces, valencianos y catalanes. Todos unidos por el objetivo común de apoyar a los vecinos que llevan manifestándose diariamente, haciendo frente al frío y las multas, desde hace meses. Les esperaban Joaquín el Cura (un sacerdote murciano muy vinculado a la lucha social) y un nutrido grupo de vecinos, así como una mesa llena de productos gastronómicos murcianos (empezando por los suculentos pasteles de carne).

El clima de hermanamiento fue increíble. No había catalanes, murcianos, andaluces o valencianos. Había personas unidas en una causa común: la lucha por el futuro de una ciudad, y la unión contra los atropellos y abusos de poder de la mafia que apuntala a Cifuentes, apalea a manifestantes pacíficos y multa a ancianos que no quieren verse separados de su ciudad con un muro frente a sus puestas. Unidos contra la prepotencia, el desprecio al pueblo y el abuso de poder.

Como dijo una de las vecinas más ancianas,"el pueblo es más inteligente que su clase política" www.laopiniondemurcia.es/murcia/2018/04/08/visca-murcia-visca-cataluna Y el PP que lleva expoliando Murcia desde hace décadas le dio la razón. En el desfile del Entierro de la Sardina, sacaron expresamente una carroza para burlarse de los catalanes twitter.com/JoaquinClares/status/982731326955671553

En resumen, fue un acto memorable que terminó verdaderamente bien. Y que me lleva a la siguiente reflexión ¿Cuál de estas dos estrategias es la que debemos seguir quienes no queremos que Cataluña se vaya de España?:

A) Mostrar a los ciudadanos catalanes un país donde se encarcela a los políticos que han votado, mientras Europa los deja en libertad provisional. Un país donde se les imputan delitos que los jueces extranjeros no ven. Un país donde locutores subvencionados por el Gobierno piden poner bombas en las cervecerías alemanas debido a lo anterior. Un país donde el partido del gobierno cierra filas para defender y amparar la corrupción y la falsificación de actas sobre másteres inexistentes. Un país, en suma, donde el respeto al ciudadano, la Justicia, la transparencia y la búsqueda del progreso social, son sustituidos por los intereses bastardos de una mafia endogámica.

B) Mostrar a los ciudadanos catalanes un país donde la Justicia es independiente y se limita a aplicar la ley sin seguir estrategias políticas. Un país donde cada céntimo de dinero público es bien invertido en beneficio de todos. Un país donde la transparencia y el buen gobierno son una realidad. Un país donde los ciudadanos son protagonistas de la política. Un país donde se persigue la corrupción, sea de CIU o del PP. Un país donde la policía no apalea arbitrariamente. Un país donde la ley se interpreta del modo que garantice la máxima libertad para todos. Un país donde no existen vacas sagradas, y los más ricos pagan en proporción a sus fortunas, invirtiéndose el dinero de los impuestos en dar bienestar y oportunidades a todos. Un país donde se respeta la identidad cultural de cada persona, y no se usa para dividirnos artificialmente. Un país que nos permita estar orgullosos de las instituciones, porque funcionan y sirven al bien común.

Ayer en Murcia se vio claramente que, aplicando la opción B), la solidaridad puede romper cualquier muro. Construyamos un país que no dé vergüenza ajena, y animemos a cada ciudadano a pelear por conseguir ese objetivo. Desde el respeto a la diversidad y pluralidad de cada territorio, esa causa común puede unir a la inmensa mayoría.