Pasamos de escandalizarnos de la precariedad del mileurismo a que un mileurista sea parte de la aristocracia obrera. Los precios han seguido subiendo, al contrario que nuestros salarios, somos más pobres y no tiene pinta de solucionarse.
Tiempos de tertulias con enjundia, tiempos con músicos diciendo lo que querían, con programas infantiles nada infantilizados... Si se mira con perspectiva, fueron años de un progreso -en ese aspecto- que ahora no tenemos.
Y seguimos utilizando la "psicopatía" mal, relacionándola con el gusto por la muerte, la crueldad, etc. De hecho la mayoría de IAs son psicopáticas, pero no por lo de la noticia, sino porque son incapaces de crear vínculos afectivos o de entender los sentimientos ajenos -y propios, como la alexitimia.
Se la colaron a El Plural y ahora andan enfadados. Si buscáis información de hace días sobre este hacker y su organización la mayoría de noticias y la mayor cobertura fue de El Plural. Ahora dirán lo que quieran, pero nada podrá borrar que a su director y demás responsables de El Plural se la han metido doblada y hasta el fondo. Y sus noticias desde el sábado son la arcada final.
De hecho el estrés y las consecuencias psicológicas del acoso laboral ya forman parte de motivos legítimos de baja, es decir como enfermedades profesionales, o eso pensaba yo.
A estos les requisan e investigan sus ordenadores y no saben ni por qué trama específica es ni por qué delito, ya que acumulan tanta mierda que no saben ni desde dónde les vienen dadas.
A mí no me interesa el fútbol, me aburre, como me aburren las personas que hablan mucho contra el fútbol. Me sucede con muchas cosas, como con la religión -en la cuestión de la fe-, me cansa tanto un creyente dándome la murga como la del ateo dándome la murga. Entre todos los gustos individuales, que lo lleven como quieran, pero que no den la turra.
Si nos pican se mueren, pero no sé hasta qué punto es responsabilidad nuestra, que no queremos obviamente que nos piquen. Si pudiesen entender que si lo hacen la palman seguro que avanzaríamos en nuestra relación.