Entono el mea culpa reconociendo que sentí un tremendo asco y total repulsa por esta persona cuando me enteré de la noticia hace unos días. Y creo que no soy el único por aquí. Como muestra, lo que dice #9.
#19 Con las polaroid, ni hay tanta gente que las tenga, ni hay tanta facilidad para distribuir copias, por lo tanto el fenómeno (si existe) es infinitamente menor. Supongo que tu significa que vas medio en broma, pero con los comentarios escritos nunca se sabe...
Y en cuanto al final de tu comentario, te doy parte de razón. Lo que hoy es escandaloso y transgresor, posiblemente mañana no lo sea. Pero solo posiblemente... puede ocurrir que se vuelva aún más intolerable.
Lo que se ve natural a los 12-17 años no es lo que se ve natural cuando uno cumple 25, 35 o 50 años. No es generacional, es cosa de las hormonas. Si además somos conscientes de que estos chavales no hacen esto como algo natural, sino como algo provocador y transgresor, podéis estar seguros de que no les hará mucha gracia que se publiquen sus fotos sensuales fuera de contexto.
Por cierto (contestad si queréis, claro) ¿qué edad tenéis? ¿me equivoco si pienso que no andáis lejos de la horquilla de la que se habla en la noticia? Yo, por suerte o por desgracia ya la pasé hace más de una década.
#3#4#5 El problema, como dice #8 es que lo hacen chavales y chavalas inmaduros, sin conocimiento de las consecuencias que sus actos tienen.
Si un niño de 15 años le enseña sus partes a una chica ("entre ellos y por voluntad propia"), aunque no me gustaría que mi hijo lo hiciera, realmente no pasa nada. Pero si se intercambian fotos, ese material les puede traer importantes consecuencias al poderse distribuir entre los amigos, conocidos, amigos de amigos, o publicarse, e incluso salir a la luz años después, cuando la persona sea adulta y tenga que cargar con ese acto de inmadurez.
¿Os imagináis que salieran a la luz las fotos picantes que se hizo en su adolescencia un reputado abogado o una ministra? ¿Cómo podría afectarle en su carrera, además de emocionalmente?
¡Increíble! Al principio pensé que era puro cuento. Me imaginé paseando por ahí con mi perro riéndome de los crédulos... pero siendo un labrador, ¡¡parece que tendría todas las papeletas de quedarme sin él!!
Si el titular fuera: "Cabezón es el insulto que más se oye en los patios de los colegios". ¿Armaríamos tanto revuelo? ¿Los maricones/mariquitas/gays/homosexuales/comolosquierasllamar tienen más derechos que los cabezones? #5 Me quedo con ese término: "politicorrectismo"
Los artículos de este blogger nunca te dejan indiferente. ¡Qué tío! Estoy deseando visitar Corea del Norte, pero es que por su culpa ya he deseado ir a medio mundo...
¿O también será un retorcido ardid?