#8 Esa gente se merece el mejor de los elogios. Pero que no se aprovechen de esos valores de la población española para ponerse medallas ellos, que están dejándolo todo hecho unos zorros. Declaraciones como esas tiran mierda sobre las víctimas.
#12 Vale, ya no soy novato, pero no tenía ni idea de eso...Recuerdo que una vez colgué una serie fotográfica como esta y me dijeron que incluya el acrónimo. Pues vale...Gracias.
#2 Pues da igual, yo me he descojonado al verlo. Si a alguien le llega gracias a mi meneo, pues guai. Veo que el enlace tampoco tuvo mucho éxito. Y si es real o no, ¿qué mas da? Mira dónde lo he colocado, en humor. No en tv o medios o algo parecido. Que aproveche el almuerzo.
En un post anterior del autor: "Ahí voy, al tema de los dominios, por que hoy una vez mas he podido ver la mala práctica que tiene 1and1. Resulta que a falta de un mes para que te expire un dominio deciden renovartelo unilateralmente por un año mas, sin consultarte, pasándote la factura de las nuevas renovaciones y sin tiempo de reacción. Vamos a ver, si el registro de un dominio es por 12 meses, ¿ por que narices renuevan automáticamente a los 11 meses ?. Como cliente quiero tener el poder de decidir el destino de mi dominio. Ese poder implica decidir en no renovarlo un día antes de la fecha de expiración".
"El trabajo no es necesario. Y lo que estoy diciendo es eso: el trabajo siempre es explotación. Es necesario huir de los imaginarios que dignifican al trabajador sin cuestionarse la naturaleza del trabajo. Si a la moralidad burguesa le molesta lo que hago, pueden irse a la ópera, que aún quedan entradas. Allí no verán pobres. Yo no soy propietario de cadenas de confección de ropa barata con niños explotados en países exóticos, tampoco vendo masivamente productos tóxicos o engaño a ancianas para robarles los ahorros de su vida, como hace la gente fina de este país. Me encantaría ver un día preguntas de ese cariz dirigidas a los grandes peces gordos". Grandes declaraciones.
Me gustó el final: "¿Qué mejor que unas muertes y agresiones gratuitas con la intención de generar en el pueblo la añoranza del orden mantenido por la policía borbónica? ¿Qué mejor que practicar entre el pueblo llano “la estrategia de la tensión”, tan de actualidad en el ambiente político italiano de la década de los setenta, momento en que fue escrito el libro? Un orden que, por otra parte, como bien indica el gran escritor siciliano, era un “imperecedero simulacro que han anhelado o deplorado siempre los italianos, sobre todo los del sur; que nunca han tenido pero –curioso espejismo- siempre recuerdan”.