#4 Es delicada la situación como para ofrecer una solución. Creo que la voluntad del articulo es mostrar que no tenemos una solución y que vamos a necesitar generar una respuesta popular antes de que el rudio ensordecedor de una escasez de petroleo permita a los que tienen soluciones sencillas inmeditas, (e ineficaces) se impongan sobre los demás.
#1 Totalmente de acuerdo, el peso de la ley de desperdicio debe recaer sobre las grandes empresas, sobre todo en los intermediarios como los supermercados. Que son un cuello de botella entre los agricultores y los consumidores. De esto va la propuesta, hacer la Ley más ambiciosa.
#3 Los puntos que se proponen son para poder cuantificar cuantos alimentos terminan en la basura y por que motivos, a nivel estatal no tenemos conocimiento de las proporciones de grupos de alimentos.
Entre otras cosas se propone que la ley de desperdicio incluya y apoye la rebusca, algo que se hacia hace muchos años que significa ir al campo a recoger aquello que no serà recogido por los agricultores, ya sea porque por motivos estéticos no tiene salida, porque los intermediarios aprietan con el precio haciendo inviable la recolección, porque la cosecha se ha espigado u otros. Y derivar estos alimentos a entidades que lo reparten entre gente en situación de vulnerabilidad.
Y obligar a la medición de las perdidas. Para poder actuar y reducirlas.
Lo que si es cierto es que la opción de vivir en una furgoneta o autocaravana (si puedes vivir cerca de tu centro de trabajo) es una opción al alza, y no solamente en zonas con gran densidad de población. Sinó para aquellas personas que sufren inestabilidad laboral y no pueden/quieren dedicar un 30/40 %del sueldo en alquiler. Claro que el valor de seis cifras es ridículo, como el autor del texto. Pero comprar algo mucho más económico para vivir unos años, ahorrar en alquiler y después revender, no me parece una mala opción.