#84 No te esfuerces demasiado, llevan dos décadas estupidizando con éxito a la sociedad y en mayor medida a las nuevas generaciones. Este es el resultado.
#2"Que pesadez con los fanáticos y sectarios que niegan la realidad"
Y que lo digas, no hay más que leer la estupidez que acabas de escupir para darse cuenta.
#62"hay que tener cuidado también con las cooperativas, por qué si se va todo al carajo puedes perder dinero, y mucho cuidado con las constructoras que se elijen, como se vaya al carajo, te comes el marrón tú"
Tú respetas las creencias ajenas que más o menos encajen con las tuyas propias, ni más ni menos. O me respetarías a mi si te digo que soy adorador de Hitler y que lo de exterminar a los negros y judíos en realidad no estaba mal, que en el momento en el que ocurrió la sociedad era diferente?
#27 Buen análisis. También me he fijado que por lo general en los shows infantiles de hoy día los padres casi siempre son representados como personajes estúpidos e ignorantes del que hasta sus hijos (protagonistas) se ríen.
Aún así, echarle la culpa a los dibujos animados me parece una forma jocosa de tirar balones fuera, aunque dudo que sea eso lo que quieres hacer entender.
Tus absurdas excusas son como si te digo "para qué trabajar si puedo comprar la lotería y hacerme rico". Si eres incapaz de hacerle ver a un niño lo absurdo del planteamiento que tú mismo comentas, entonces eres un claro ejemplo de lo que te contesté.
#2 Sí eso, la culpa es de Youtube, o de Netflix, o de Amazon Prime no te jode. Cualquiera menos de los padres helicóptero ultra sobre protectores que engendran pseudo-personas incapaces de lidiar con el estrés, con el miedo, con las adversidades y con otras personas. Seres incapaces de asimilar un NO por respuesta.
#25 quieres que comparemos listas de asesinos y genocidas en base a si eran creyentes o no?
Además, en ningún momento he dicho que no se pueda ser religioso y científico al mismo tiempo, he dicho que poner eso como argumento es una estúpida falacia.
Nada más que comentar. Eres un completo ignorarte.