Dónde está el SPAM aquí? En compartir un enlace? Todo el mundo lo hace con sus blogs, algunos bastante pésimos, por cierto, Seguro que tu también lo haces #1 #2
El problema es que en marean la perdiz para tener a la gente perdida durante uno, dos, tres años, cambiando de tarifas, de mercados y de compañías. Así habrá gente estafada que no sabrá ni cómo reaccionar, compensaciones que nunca llegarán a producirse y los ladrones se ampararán en la nueva Ley. Y así pescadilla que se muerde la cola. En lugar de apostar por las energías renovables o de abaratar costes (producir y transportar la electricidad no cuesta tanto dinero y los altos directivos de esas empresas ostentan un cargo completamente inútil e innecesario) lo que hacen es subir impuestos. En definitiva: robarnos. Todos son unos ladrones. Y el que lo niegue está ciego...
Cuando se "ideó" todo el tema de la TDT, también tenía que haber por demarcaciones geográficas y por obligación televisiones públicas de calidad cuyos contenidos fueran en más de la mitad informativos y en las lenguas locales y/o regionales. Así que...
Es más una curiosidad que otra cosa. No obstante, este artículo respalda algo que much@s pensamos: no por estar más horas haces las cosas mejor. La constancia, está claro, es muy importante, y la perseverancia también. Pero en el caso de esta gente hablamos de genios...con poco tiempo quizá hacían mucho.
#2 parte de razón y parte de no razón. El modelo ha cambiado. El espacio donde ofrecer contenidos ha cambiado. Ha aumentado la oferta, por el coste (a priori cero, aunque luego el mantenimiento real no es tan barato) del soporte, etc. El problema es que ahora parece que todo el que sepa vapulear el teclado es periodista. Y las opiniones en foros valen un mogollón. Siempre hay quienes van de listos criticando el trabajo de algunos buenos periodistas y que ellos no sabrían hacer la O con un canuto. Se olvidan de que la formación, en ese sector, también es un grado. También lo era antes y lo seguirá siendo. La culpa es del público en general, de la sociedad y de los propios periodistas. Pero el máximo culpable es el mismo de siempre: desde arriba se ha visto que sí, que el cuarto poder existe y se han afanado en prostituirlo. Han devaluado tanto la profesión de periodistas que han hecho que sea muy fácil comprarlos.
Está claro que es muy interesante. Pero también hay que saber diferenciar entre cuentas falsas tipo "spam" y gente que utiliza un seudónimo para aparecer en redes.
#108 Más que sacar historias turbias sobre su persona, esas que por cierto nunca se investigarán en SU fundación, creo que debemos ir a lo más simple y coherente. Si debido a su "gran personalidad y empaque histórico" (es lo que se piensa él, no yo) quiere hacer una fundación de investigación para saciar su ego que la haga pero de algo realmente útil y loable y no sobre sí mismo. Hay millones y trillones de cosas: Medicina, arte y cultura, divulgación, tecnología, ciencia, biología, música, cine, biotecnología, energías renovables, educación, etc. etc. etc.
Ultra cristiano, machista, homófobo, racista...vamos que lo tiene todo para mandar en EEUU. No pensemos que esto nos toca de lejos: aquí, de una forma más velada, puede pasar lo mismo a corto plazo. Sinceramente, espero que este señor y todos los Tea Party del mundo acaben ardiendo en el infierno.
Claro, los profesores hacen huelga porque tienen un sueldo fijo. Y usted, señor WERT, lleva TOCÁNDOSE LOS COJONES desde que es Ministro porque lo suyo es vocacional y hace su "trabajo" gratis, ¿verdad que sí?
es que en este país no vamos a pasar página nunca...se habla de una película, una PELÍCULA, entretenimiento,ocio y la visión o historia que un director, guionista, artistas, nos cuenta sobre un hecho, que para eso hay libertad de expresión en este país (por lo menos hasta la fecha, mañana quien sabe). Y la gente aprovechando para sacar izquierdas, derechas, iglesia y rouco. Copón ya. Que es una película.
no os preocupéis. suele pasar. de todas las formas, siempre habrá programas de esos que acogen a toda la escoria del sector. Y si no, fijáos en F. Marhuenda.
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