El citado protocolo para bodas, bautizos, comuniones y banquetes en general fue presentado este lunes por la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León al consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega. La «urgencia» radica en que las celebraciones prácticamente están «paradas» desde 2019 y se espera que sea «definitivo» mientras dure el escenario de pandemia, ya que cuando decaiga el estado de alarma las comunidades no podrán dictar toques de queda o limitaciones de movilidad pero sí restricciones en determinadas actividades.